Periodismo, Fútbol y Resultadismo

Yatasto

El presente de Central Norte es el ejemplo para esta reflexión. Vivimos una época donde en el fútbol se priorizan los resultados inmediatos y se pierde de vista el objetivo principal que es conformar un grupo competitivo y con identidad.

El presente cuervo es preocupante en los números, pero esperanzador en las ganas del plantel de salir adelante.
Central obtuvo tan solo 2 de 18 puntos. Si bien es cierto que mereció tener más puntos de los que tiene, el resultadismo es una tendencia que se da a todo nivel en todo el fútbol argentino.
Muchos periodistas deportivos locales por un lado, expresan que los contratos de los técnicos están para cumplirse, pero por el otro, promocionan la despedida de un técnico, llámese éste Victor Alfredo Riggio o Gustavo Coleoni, basándose en los pocos puntos obtenidos en comparación de los que tendría que tener. No sólo los periodistas. Muchas veces la gente misma, los plateístas insultan y piden la renuncia del entrenador. Ejemplo, el poco resistido técnico de Gimnasia y Tiro, cuyos hinchas no le perdonan la eliminación con Maipú de Mendoza, en el pasado Undecagonal.
“Si no gana en la próxima fecha, algo podría pasar” o “este partido que viene es determinante”, son expresiones que escuchamos o leemos a diario.
Yatasto se pregunta si acaso los periodistas deportivos no son instigadores y hasta promotores del no cumplimiento de los contratos y los procesos futbolísticos.
Del hincha se puede esperar que reaccione con vehemencia, que insulte a los jugadores –no justificamos las amenazas de muerte-, que exprese su ira, su disconformidad, pero los periodistas no pueden entrar en ese terreno pasional, más si el equipo que no ha podido obtener puntos ni ganar intenta sobreponerse a la adversidad y además cuenta con el apoyo incondicional de la dirigencia.
Hoy muchos colegas de la prensa cuestionan la continuidad de Coleoni. Pero ¿Qué hubiera pasado si el Central Norte de Coleoni hubiera ganado a San Jorge de visitante y a Central Córdoba de Santiago del Estero de local, por decir dos partidos que el cuervo pudo haberse llevado 6 puntos? Tal vez, no se estaría hablando de continuidades ni despidos.
Yatasto reflexiona en este sentido. Vemos como los periodistas locales a tono con los periodistas de Buenos Aires, y en la prisa por los resultados, se suben al caballo de la victoria que endiosa a los equipos efectivos o “sacapuntos”, teniendo en cuenta que desde el Argentino “A” hasta Primera –salvo raras excepciones- no hay equipo regular ni que juegue bien.
Subirse a esa carroza es peligroso porque el utilitarismo nunca respeta los procesos; que se aceleran o se matan antes de desarrollarse.

En el Argentino “A”, Coleoni fue el último DT en venir a Salta para hacerse cargo de Central –Laspada y Riggio ya estaban trabajando-, trajo y eligió jugadores y merece la posibilidad de que se pueda ver todo el proceso que inició y con el cual desea un ascenso como lo desean también sus hinchas.
Pero decir que una campaña mala debe terminar con el despido del técnico es sumarse a la repetición indefinida de esa dinámica autodestructiva en la que caen algunos clubes y periodistas: el resultadismo.